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El negocio de los dominios Web

Desde un humilde acceso a la Web en Paraguay, Christian Chena empezó su odisea cuando Internet ya se había caído a pedazos y daba, lo que algunos presagiaban, como sus últimos signos de vida. En unos seis años, Chena, que ahora tiene 27, se adueñó de los dominios en español más caros de la red.

En la valiosa colección de Chena se destacan, vuelos.com, comprado en 150 mil dólares, empleo.com en 70 mil, viajes.com en 300 mil y juegos.com por una cifra cercana al millón de dólares. A fines de octubre pasado, Chena se decidió a vender juegos.com y, a pesar de que se desconoce la cifra exacta de la operación, sí se sabe, por los comentarios del joven empresario en su blog, que no lo hubiera vendido por menos de 10 millones de dólares. Ésta es una transacción histórica, no sólo dentro del mercado de habla hispana, sino a nivel mundial.

Juegos.com es un sitio que genera más de 100 mil visitantes diarios y 200 mil dólares por mes. Todo ello, gracias a la facilidad de acceso que supone su término, capturando una audiencia corta en edad, pero grande en potencial.

¿Cuál es el secreto del Parking y los dominios Type-In?
El negocio de los dominios genéricos se basa en la demanda que tienen a partir de la curiosidad de los usuarios por descubrir qué hay detrás de una dirección como películas.com o animacion.com, ambos de Chena. Esta modalidad se la conoce como Type-In, y es aplicada por más del 15% de los navegantes. Este tipo de direcciones se alojan dentro de servicios de Parking, lo que significa que su propuesta de contenidos está limitada a una página puramente publicitaria. En la red de Chena, las páginas tienen la particularidad de mezclar ese estilo de rentabilidad con un contenido propio, confundiendo al visitante, pero esta opción sólo le es accesible a Chena y a otros pocos, dado el alto volumen de tráfico que gestionan.

Las empresas que proporcionan soluciones de Parking, reteniendo una fuerte comisión publicitaria, son varias. En la lista figura Sedo.com, el gigante de la venta y subasta de dominios, que da cuenta en su último movimiento, la adquisición que tramitó de la URL Punto.com, en 25 mil euros. Sedo mueve millones al año, y es partner de Google, en el sentido de que trabaja con el servicio de Parking que posee el buscador y que, a diferencia de Google AdSense, su uso está limitado a las empresas que mayor tráfico tienen. NameDrive.com, del cual Chena es el principal inversor, es otra opción interesante, a la que se suman las de SiteParker.com, Miva.com y Fabulous.com dentro de una extensa lista. Una propuesta diferente, que está funcionando muy bien en los sitios en general, es ImpresionesWeb.com, un servicio que paga según la cantidad de impresiones y que trabaja con páginas de contenido original, por lo que no actúa como Parking.

El dominio utube.com es un excelente graficador de otra de las situaciones relacionadas con el negocio de las URL genéricas, que no guarda relación con un término general, sino con una marca reconocida a nivel mundial, YouTube. Los navegantes malinterpretan la forma en la que se escribe el rey del video, haciendo que la empresa dedicada al mercado de las tuberías, que lleva el particular nombre Utube, reciba un tráfico inesperado. No es el único caso, de hecho Yahoo! dio a conocer recientemente los mal tipeados términos que más se buscan en su motor.

Recorriendo algunos Blogs, uno puede hallar más información sobre estos negocios, de primera mano, de la palabra de los propios protagonistas. El rey de los dominios de Paraguay está en chrischena.com, El CEO del Grupo español ItNet espera en CarlosBlanco.com, y otros expertos que se dedican a este mundillo tan particular de Internet cuentan sus experiencias en DominiosIDN.com, BlogDominios.com y DNJournal.com.

Numerosos analistas creen que Internet está próxima a golpearse con la misma pared con la que se chocó en 1999, sin embargo no podrían estar más lejos de la realidad. Internet es el medio más dinámico y cambiante que uno pueda imaginar, pero ha sabido encontrar un equilibrio racional, apoyándose en el ingenio y la experiencia de cada emprendedor. Claro que continúan surgiendo casos de fracaso, pero eso no es culpa de la red, sino de la falta de comprensión sobre lo que la plataforma digital es capaz de soportar. Eso fue lo que terminó con el boom de los Punto Com, época dorada que duró unos años y que no volverá a repetirse en igual magnitud –en aquellos días, el dinero llovía-. Si bien el caso de Chena no tiene semejanzas con ningún otro en Latinoamérica, no es el único negocio que está triunfando en Internet.